a los más pequeños
Saber reaccionar primero, y actuar después, puede serle muy útil en caso de accidentes infantiles. Luego, mantenga la calma y avise al servicio de urgencia. Ellos le indicarán en todo momento lo que debe hacer. Siga sus instrucciones.
No obstante, es importante tener unas nociones mínimas sobre cómo intervenir ante todo tipo de incidentes domésticos en los que se vean implicados los chicos.
Golpes y caídas
Constituyen la primera causa de accidentes por frecuencia y la cuarta en cuanto a mortalidad infantil. El tipo más común es la que se produce desde un nivel a otro (cambiadores de bebé, sillas, ventanas y balcones...).
En caso de que cause un chichón se debe aplicar hielo envuelto en un paño durante 30 ó 60 minutos. Nunca lo ponga directamente sobre la piel, ni cubra la zona inflamada. Si se produce un hematoma, vigile su extensión y en el caso de que aumente de tamaño traslade al pequeño al centro hospitalario más cercano.
Quemaduras
Son, junto con las abrasiones por agua hirviendo, la quinta causa de muerte infantil y más del 55 por ciento afectan a varones menores de dos años.
Por fuego. Es importante no intentar quitar la ropa quemada si está adherida a la piel y solicitar ayuda inmediata. No unte la quemadura con aceite.
Por contacto. Si la quemadura es superficial, habrá que poner la zona afecta entre 10 y 15 minutos bajo un chorro de agua fría. En el caso de que aparezcan ampollas, no las pinche. Si la quemadura es profunda, deberá acudir a un centro médico lo antes posible tapando la herida con un apósito, nunca con algodón. No use ningún tipo de pomada.
Heridas
Ante las lesiones leves, lo importante es limpiar la zona y desinfectarla. En el caso de que esté ya infectada se debe acudir al centro sanitario más cercano para proceder a su tratamiento.
Ahogamientos y asfixia
El atragantamiento ocurre frecuentemente con objetos pequeños, como globos, partes de juguetes y monedas, entre otros.
En el caso de los incidentes por atragantamiento, despeje el conducto respiratorio colocando al paciente boca bajo o haciéndole bajar la cabeza. Comience la respiración artificial de boca a boca si tiene conocimiento de primeros auxilios.
Intoxicaciones
Son la sexta causa de muerte infantil, y las víctimas más frecuentes son los menores de cinco años. Más del 90% de las intoxicaciones se producen en el hogar o en su entorno. Los productos de limpieza, alcohol, pesticidas y medicinas son las principales fuentes de intoxicación en niños. En este caso debe llamar directamente al servicio medico de emergencias.
Golpe en los ojos
Originariamente y como primera acción debe lavar los ojos del chico con agua. Si hay hematoma en la ceja o el párpado, aplicar hielo o compresas frías y administrar un analgésico para el dolor. Si el párpado se hincha en exceso, acudir al médico.
En la nariz
Mantener al herido respirando por la boca y sentado, inclinándolo hacia adelante, para no permitir que la sangre baje por la parte posterior de la garganta.
Aplicar compresas frías sobre la nariz para reducir la hinchazón. Si es posible, el paciente debe sostener la compresa de tal manera que no se aplique una presión excesiva. Para ayudar a calmar el dolor, se recomienda dar un analgésico.
Saber reaccionar primero, y actuar después, puede serle muy útil en caso de accidentes infantiles. Luego, mantenga la calma y avise al servicio de urgencia. Ellos le indicarán en todo momento lo que debe hacer. Siga sus instrucciones.
No obstante, es importante tener unas nociones mínimas sobre cómo intervenir ante todo tipo de incidentes domésticos en los que se vean implicados los chicos.
Golpes y caídas
Constituyen la primera causa de accidentes por frecuencia y la cuarta en cuanto a mortalidad infantil. El tipo más común es la que se produce desde un nivel a otro (cambiadores de bebé, sillas, ventanas y balcones...).
En caso de que cause un chichón se debe aplicar hielo envuelto en un paño durante 30 ó 60 minutos. Nunca lo ponga directamente sobre la piel, ni cubra la zona inflamada. Si se produce un hematoma, vigile su extensión y en el caso de que aumente de tamaño traslade al pequeño al centro hospitalario más cercano.
Quemaduras
Son, junto con las abrasiones por agua hirviendo, la quinta causa de muerte infantil y más del 55 por ciento afectan a varones menores de dos años.
Por fuego. Es importante no intentar quitar la ropa quemada si está adherida a la piel y solicitar ayuda inmediata. No unte la quemadura con aceite.
Por contacto. Si la quemadura es superficial, habrá que poner la zona afecta entre 10 y 15 minutos bajo un chorro de agua fría. En el caso de que aparezcan ampollas, no las pinche. Si la quemadura es profunda, deberá acudir a un centro médico lo antes posible tapando la herida con un apósito, nunca con algodón. No use ningún tipo de pomada.
Heridas
Ante las lesiones leves, lo importante es limpiar la zona y desinfectarla. En el caso de que esté ya infectada se debe acudir al centro sanitario más cercano para proceder a su tratamiento.
Ahogamientos y asfixia
El atragantamiento ocurre frecuentemente con objetos pequeños, como globos, partes de juguetes y monedas, entre otros.
En el caso de los incidentes por atragantamiento, despeje el conducto respiratorio colocando al paciente boca bajo o haciéndole bajar la cabeza. Comience la respiración artificial de boca a boca si tiene conocimiento de primeros auxilios.
Intoxicaciones
Son la sexta causa de muerte infantil, y las víctimas más frecuentes son los menores de cinco años. Más del 90% de las intoxicaciones se producen en el hogar o en su entorno. Los productos de limpieza, alcohol, pesticidas y medicinas son las principales fuentes de intoxicación en niños. En este caso debe llamar directamente al servicio medico de emergencias.
Golpe en los ojos
Originariamente y como primera acción debe lavar los ojos del chico con agua. Si hay hematoma en la ceja o el párpado, aplicar hielo o compresas frías y administrar un analgésico para el dolor. Si el párpado se hincha en exceso, acudir al médico.
En la nariz
Mantener al herido respirando por la boca y sentado, inclinándolo hacia adelante, para no permitir que la sangre baje por la parte posterior de la garganta.
Aplicar compresas frías sobre la nariz para reducir la hinchazón. Si es posible, el paciente debe sostener la compresa de tal manera que no se aplique una presión excesiva. Para ayudar a calmar el dolor, se recomienda dar un analgésico.